Después del terremoto del 16 de abril del 2016 que afectó a la Costa Ecuatoriana, muchos arquitectos internacionales manifestaron su deseo de ayudar tanto con el diseño y construcción de refugios temporales como también con posibles obras para la reconstrucción de esta zona afectada del país. Uno de ellos fue el arquitecto japonés ganador del Pritzker 2014 Shigeru Ban, quien realizó una visita a las zonas afectadas de la provincia de Manabí y ofreció el 02 de mayo del 2016 en el Coliseo General Rumiñahui una conferencia denominada sobre posibles albergues temporales ante un público de 5000 personas.

Paralelamente, otro de los arquitectos que visitó dichas zonas fue el japonés Hiroto Kobayashi, Decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Keio (Tokio, Japón), que tras su experiencia en generar equipamiento en otros desastres naturales como fue el terremoto de Japón en el  2011, realizó también una visita a las zonas devastadas y recientemente en el mes de febrero del presente año expuso la conferencia denominada “Indigenous Architecture and Agile Technology -Veneer House Experience-“ en el Auditorio del Colegio de Arquitectos del Ecuador, Provincial de Pichincha ante un público de alrededor de 200 personas.

El Arquitecto japonés utiliza la madera laminada seccionada a través de corte CNC  para la realización de sus proyectos; considerando que este proceso de ensamblaje de las piezas de madera genera estructuras fuertes y flexibles, siendo este un “sistema que hace posible la construcción de un marco estructural rápido, incluso sin necesidad de herramientas y conocimientos especializados”, acotó Kobayashi.

En su conferencia reiteró con énfasis la rapidez y bajos costos con los que se realiza este tipo de construcciones, por lo cual considera como una opción importante la utilización de este sistema para generar respuestas rápidas y sólidas ante la emergencia.

Otro sistema constructivo que estuvo presente dentro de su exposición fue el uso de la caña guadua, en donde explicaba que en caso de utilizarse para la reconstrucción de viviendas, estas deberían someterse a un proceso antifuego para una mayor resistencia. Con este sistema constructivo el diseño de vivienda que él plantea en una sola planta, llevarían un tiempo de construcción de 2 semanas y las de dos plantas, 4 semanas.

Para finalizar, en su conferencia terminó agradeciendo al CAE-P y a la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, por el espacio de diálogo brindado al público asistente y cerró con una demostración de su prototipo de modelos y ensambles construidos.